Editorial del 1 de febrero del 2021.
Derrumbes e inundaciones en distintos puntos del país, con gente herida y muerta son la dramática expresión de la criminal irresponsabilidad del proyecto de desarrollo dirigido por empresarios, terratenientes y banqueros, con un Estado que, según ellos entienden, debe funcionar al servicio de sus mezquinos intereses.
El incendio de un tanque de alcohol en Petropar es otra expresión de esa criminal irresponsabilidad que, dado el hábito saqueador y corrupto de las patronales y sus gobiernos, abre dudas sobre la posibilidad de que sea un “golpe de seguro” en el que cobren millonaria indemnización además de haber robado unos millones de litros.
Hablar de la democracia sin el “apellido”, nos puede llevar a falsas ilusiones y a desilusiones. A ilusionarnos creyendo que esta democracia puede resolver las injusticias sociales. O desilusionarnos pensando en que la democracia no sirve.
Resulta que esta democracia es una democracia burguesa, o sea, una democracia de las patronales. Se compra la libertad, se compra la justicia, así como la salud y la educación de calidad. Es la democracia de los poseedores que manejan las instituciones públicas que transmiten las prioridades, los valores, la cultura y la educación de estos multimillonarios.
La democracia burguesa es una propuesta de ordenamiento político y administrativo de la dictadura de las patronales. Recordemos que mientras exista división de clases sociales, los Estados estarán organizados según la fuerza y la dominación que pueda ejercer una clase sobre el resto de la sociedad. De modo que la dictadura de la clase burguesa puede expresarse de dos formas políticas: bajo un régimen totalitario como el de Stroessner, o bajo un sistema político que garantice ciertas libertades de circulación, reunión y expresión, siempre y cuando no amenacen los intereses de la clase que está en el poder.
La democracia que se expresa en el Paraguay tiene más de un “apellido”, como la misma patronal que suele tener apellidos compuestos y pomposos. Lo que tenemos en el Paraguay es una Democracia Lumpen-burguesa y Mafiosa. Con un Estado que solo transmite inseguridad, temor y rabia por su inoperancia y su sola capacidad represiva y criminalizadora de todo esfuerzo que cuestione la injusticia reinante.
A 32 años de la caída de Stroessner, la necesidad de enjuiciar y castigar a torturadores, saqueadores y asesinos, además de recuperar tierras, bienes y demás riquezas malhabidas, forma parte del necesario y ejemplar paso que debemos dar para avanzar hacia una democracia de las mayorías, una democracia obrera, una democracia de las y los trabajadores.
La ausencia del Juicio y Castigo ha permitido que represiones y la agudización de la violencia como la masacre de Curuguaty, las torturas en Ciudad del Este por parte de la Marina o el reciente infanticidio perpetrado por la Fuerza de Tarea Conjunta, además de la existencia de presos políticos, sigan configurando ese Terrorismo de Estado sanguinario del stronismo.
Así también, esa deuda con la justicia ha permitido que grandes negociados como los de los bancos en los años ’90, el vaciamiento del Banco Nacional de Trabajadores, las extorsiones y secuestros, la expulsión ilegal del campesinado, la precarización de los puestos de trabajo, el negociado del metrobus, las grandes corrupciones en tiempos de pandemia, se sigan sucediendo con total impunidad, generando la naturalización de esta caótica y hambreadora propuesta de dominación de las patronales, con un importante grado de resignación en una población que se siente obligada a concentrarse en la subsistencia diaria y no tiene el tiempo de reflexionar colectivamente sobre quiénes son los responsables de su lamentable situación y sobre cómo superarla. Dificultad agudizada por la avasalladora propaganda individualista y engañosa de “el que quiere puede” o “que cada uno es responsable de su situación”.
Como clase trabajadora hemos podido vivir la experiencia de esta pandemia, demostrándonos que muchos de los problemas son comunes a todas y todos, que podemos resolver estos problemas con nuestra fuerza y nuestra solidaridad colectiva, que las patronales son mezquinas y siguen operando en la línea del “sálvese quien pueda” y del “cada uno para sí”, que estas patronales son corruptas y parásitas, que somos las y los trabajadores quienes producimos todo lo que nos rodea para que unos cuantos millonarios disfruten injustamente del producto de nuestro esfuerzo, y que podemos trabajar una unidad desde abajo para ir por lo que nos pertenece, recuperar bienes y tierras para dirigir el país con justicia social e igualdad de oportunidades.
Luchar por una democracia obrera, por una democracia de las y los trabajadores no es sencillo. Las patronales trabajan para sembrar desconfianza entre nosotros, para dividirnos y para tentarnos con salidas individualistas. Desde sus canales, desde internet, desde sus radios, sus shoppings centers, desde el Estado y su propuesta educativa, nos envenenan con ideas y cultura que nos organicen para seguir siéndoles funcionales a sus intereses.
Por eso es tan importante ubicar el apellido de la democracia. Y a 32 años de la caída de Stroessner, asumir el compromiso de derrocar a Abdo Benítez y al gobierno de las patronales. El tiempo que nos lleve lograr esa amplia y profunda unidad para avanzar hacia un gobierno de la clase trabajadora, dependerá del esfuerzo de la dirigencia y la militancia de sindicatos, movimientos campesinos, estudiantiles, territoriales, culturales e indígenas, para recuperar la confianza en nuestra propia fuerza y lograr esa poderosa síntesis política capaz de triunfar.
Ilustración de inicio de Javier Laterra para Adelante!.
Lo q’ falta…
Un negociador…
Un conciliador, por eso de los conflictos de intereses…
Partamos desde las congruencias, lo q’ tenemos en común…
Y la solución vendrá por descarte…
El interés general, sobre el interés particular…
Rpt…
Un nuevo modelo basado en el sincretismo político.
Ética …
hacer lo correcto …
Si el político es un individuo …
El individuo es la masa …
Si el individuo se lo mete …
La masa también …
La democracia, es para todos … 🤔
Democracia deliberativa, participativa …
El sincretismo como modelo de la democracia de la liberación… del cretinismo de la opresión por el sistema de partidos.
Sería la propuesta…
Contra esos hombres transgrediendo los limites de las consciencias …
La política no es el pensamiento excluyente …
Q’ tiene como objetivos, intereses particulares …
La política se basa en satisfacer las necesidades de la gente a través de la gestión pública y de las reglas normativas para una mejor calidad de vida…
Es la regla q’ debería regir para el Gobierno de los hombres.
Pero la herramienta es el caballo de troya de los Partidores.
En los asuntos del Estado :
El comportamiento justo o injusto …
De los hombres q’ ejercen el poder …
Utilizando los conceptos de la República y la democracia …
En muchos casos olvidando del porq’ la razón de la existencia.
Los hombres injustos ejercen y reclaman sus «derechos»
Utilizando la retórica como elemento disuasivo y contundente sobre los hombres justos.
La letra de la ley, en este caso debería respetar el principio de las cosas…
La democracia es un principio de acuerdos ciudadanos, responde a un pacto social, basado en el respeto al otro; pero sobretodo responde a la libertad de elegir con quien seguir …
Acaso q’ la letra de la ley no está basada en la ética ?
Todos los días nos vemos rebozados de las noticias de los «Embanderados de la República», esos representantes impuestos a través de una lista sábana …
Es q’ en el Estado democrático-elitista …
Es el concepto de igualdad y equidad q’ profesan los «Partidores» …
Alguna vez se dieron cuenta porq’ se llaman partidos ?
Porq’ están para partir/dividir …
Son esos q’ han instalado la idea de la perpetuidad de un sistema temporal …
Es la hora de cambiar el » Chip «, el adn mental q’ nos sujeta…
El cambio de pensamiento … es ejercer la vigencia del art. 2 de la Const. Nacional.
Ya no más del apoderamiento por el art 125 … la libertad de organizarse de esos hombres «libres» sujetos por la herramienta del sistema de partidos q’ perdieron la esencia …
Y en el camino …
Hasta la decencia …
«El todo es más q’ la suma de sus partes…»
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