Autoridades del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS) informaron que solo aguardan la decisión de Mario Abdo Benítez sobre la propuesta de aumentar el salario mínimo G. 15.349. La directora del Trabajo, Karina Gómez aseguró que dentro de sus atribuciones puede tomar la decisión de acuerdo al Índice de Precios al Consumidor (IPC), actualizado periódicamente por el Banco Central del Paraguay.

Lo que no cuenta la directiva del MTESS es que como integrante de la Comisión Nacional del Salario Mínimo en representación del Poder Ejecutivo, avaló esta ofensiva propuesta de «aumento» que elevaría el salario base a G. 2.208.189. Desde organizaciones sindicales adelantaron su categórico rechazo a la propuesta.

Según datos de Acción Sindical Clasista, ya en el 2019 el salario mínimo cubría apenas un 49% de la canasta básica familiar. «La propuesta se basa en la obsoleta medición del IPC emitido por el BCP, que no contempla las condiciones de vida reales de trabajadores. Este aumento se pretende dar en el marco de una pandemia que afecta profundamente a todas/os los trabajadores y sus familias«, asegura la articulación de sindicatos.

«Denunciamos que quienes deben velar por mejores condiciones de trabajo hoy son los que sostienen el miserable aumento del 0,7% del salario mínimo vigente, es decir, G. 15.349«, expresó Acción Sindical Clasista en su cuenta de Twitter.

Por su parte, el titular de la Central Unitaria de Trabajadores – Auténtica, Bernardo Rojas, sumó su rechazo a la propuesta asegurando que «el índice que arroja el Banco Central del Paraguay es falso. Lo decimos responsablemente. Ya hemos manifestado eso, presentamos estudios técnicos pero el BCP llamativamente nunca pasa del 0,1% o 0,2% su inflación«.

El BCP asegura que la inflación integral del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de mayo del 2009 al del 2020 alcanza el 0.7 %, porcentaje que equivale a G. 15.349. «Ellos en su canasta básica incluyen autos, whisky, vacaciones y son cosas que hay que replantear. Nosotros tenemos seis ejes que son salud, educación, vivienda, vestimenta, alimentación y comunicación«, aseveró el titular de la CUT-A.

Denuncias de trabajadores del sector gastronómico

En las últimas semanas se ha difundido en redes sociales denuncias de trabajadoras y trabajadores del sector gastronómico sobre graves fraudes laborales así como maltratos, despidos injustificados y no pago de indemnizaciones. Según datos de Acción Sindical Clasista, 7 de cada 10 trabajadores del sector tienen un empleo informal. El gremio ha recibido denuncias de tratos humillantes y amenazas de despido, cuando trabajadores de hoteles y restaurantes reclamaban pago de horas adicionales, o medidas sanitarias acordes a las regulaciones del MSPyBs.

Algunos de los locales denunciados son BACON BURGER, el Restaurante TAJ Asunción, Sammy Express – Pizzería, El Estadero, la Confitería Margarita y Trigo, Todo Rico, Benditas Empanadas Gourmet, Quiero Fruta, entre otras. El no registro de trabajadores en IPS, el no pago de indemnizaciones por despidos injustificados, el no pago de salarios durante el periodo de prueba y el despido bimensual de trabajadores, son impunes medidas que asumen los empresarios del sector gastronómico, quienes además amenazan a los trabajadores que protestan con no ser contratados por ninguna empresa del sector, evidenciando un cierre corporativo en torno a la superexplotación con la complicidad del Ministerio de Trabajo.

Fotografía: Daniel Ñamandú